Sorry, you need to enable JavaScript to visit this website.
Búsqueda
Shopping Cart
Breadcrumbs

Mascotas de compañía para personas con discapacidad

Subtítulo
Las mascotas de compañía son habitualmente perros que asisten principalmente de manera emocional a personas con discapacidades.
Imagen destacada
Body

 

Aunque su labor es acompañar a las personas con discapacidad física, psíquica o sensorial, es importante saber que son perros de trabajo y existe una diferencia entre los de asistencia y los de terapia. Una de las diferencias más importantes es que los perros de asistencia viven con la persona a la que asisten, mientras que los de terapia viven con su guía y se desplazan con su guía y un terapeuta para llevar a cabo una terapia en concreto, durante un tiempo determinado. 

¿Qué es un perro de asistencia?

Un perro de asistencia es un perro cuyo trabajo es asistir a la persona con la que vive; es decir, realizar una función que la persona no puede llevar a cabo por sí misma. El caso más conocido es el de los perros que acompañan a los invidentes, pero hay muchos más, como los perros que detectan las bajadas de azúcar en las personas diabéticas, los perros que ayudan a las personas sordas o los que ayudan a las personas con movilidad reducida.

Es un trabajo de 24 horas, ya que el perro convive con su responsable y le asiste en todo momento, tanto en casa como en el exterior. Son animales que se entrenan desde cachorros para realizar este trabajo y cuentan con una acreditación de la Administración correspondiente para que se les permita entrar en cualquier lugar al que vaya su responsable. 

¿Cómo ayudan los animales a las personas con discapacidad?

Está demostrado que los animales son un elemento motivador muy importante para las personas con discapacidad. Este es el valor que tienen a la hora de realizar una terapia asistida con animales.

Dependiendo de la discapacidad de la persona y del objetivo que se desee conseguir, el terapeuta lleva a cabo su trabajo acompañado por el perro y su guía. Niños con trastorno del espectro autista, personas con alzhéimer o con parálisis cerebral reciben con alegría a su “terapeuta” canino, lo que les motiva a llevar a cabo acciones que, de otra manera, no se esforzarían en realizar. 

 

 

Además de la terapia, los perros ya se están utilizando en los colegios como acompañamiento y elemento motivador del aprendizaje con niños con problemas de atención, como apoyo emocional a niños que deben ir a los juzgados a declarar por asuntos familiares, como apoyo a las víctimas de violencia de género, para acompañar a niños enfermos en los hospitales o para combatir el bullying.

Aunque los perros son los animales más utilizados para la terapia y el acompañamiento, en la actualidad se están utilizando también pequeños animales, como conejos, cobayas o agapornis, por ser animales que los niños o las personas mayores pueden coger en brazos y sentirse arropados con ellos. 

La terapia ecuestre es también de gran utilidad, sobre todo para personas con discapacidad motora y otras enfermedades degenerativas. El caballo aporta la movilidad que no tiene la persona con discapacidad y aporta beneficios, como la mejora del sistema motor, el aumento del equilibrio y la coordinación y el incremento de la seguridad en sí mismo, entre otros.

Sin olvidar, por supuesto, que además de los beneficios terapéuticos, los animales aportan felicidad y cariño sin pedir nada a cambio. Son una compañía agradecida y siempre están cuando se les necesita.

 

Comentarios (0)
Modal Register